Nuevo encuentro de Larreta con vecinos

El jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez  Larreta, concurrió al club Villa General Mitre, ubicado en la calle Gavilán 1540, del barrio homónimo, donde se realizó uno de sus acostumbrados encuentros con vecinos.

Asistieron autoridades comunales encabezadas por su presidente, Carlos Guzzini; el subjefe de la Policía Metropolitana, Ricardo Pedace, otros funcionarios de la Ciudad y de la Comuna y una concurrencia estimada en trescientos vecinos.

En su alocución previa a la intervención de estos, el jefe de Gobierno dijo que visita los distintos barrios tres veces por semana. “Y siempre aprendo cosas nuevas”, destacó.

Al igual que en sus recorridas barriales cuando era jefe de Gabinete, Rodríguez Larreta instó a los asistentes a referirse “sobre todo a los problemas del barrio”. “Aprovechemos el tiempo para hablar de las cosas que ustedes creen que tenemos que mejorar”, exhortó, y alentó: “Si alguno tiene alguna sugerencia, propuesta o proyecto, bienvenido sea; muchas cosas que hacemos en la Ciudad surgen de reuniones como esta”.  

Asimismo, pidió “entender que no todos piensan lo mismo, pero vivimos en una democracia y la democracia implica esto”,  admitió que “el gobierno comete errores” y resaltó que el encuentro no tenía “nada que ver con una reunión política”.

“Acá hablamos del barrio, no le importa a nadie a quién votó ni a quién va a votar cada uno, y no viene al caso si el gobierno le gusta o no le gusta”, enfatizó.

Reclamos de los vecinos

A su vez, las intervenciones de los vecinos consistieron, en su mayoría y como es habitual, en quejas por el mal estado de las veredas, la insuficiente iluminación, la falta de lugares para  estacionar, los frecuentes cortes de energía eléctrica, los problemas ocasionados por los contenedores y los muchos episodios de inseguridad. No podía dejar de manifestarse la tradicional animadversión del vecino hacia el árbol plantado frente a su casa, que tuvo su más vehemente portavoz en un asistente que contó que los plátanos le “provocan mucha pérdida de plata porque cada vez que viene el otoño caen millones de hojas, tapan los techos, se obstruyen los pluviales”, y en consecuencia, dijo, “cada vez que llueve me entra agua”. También acusó: “El plátano levantó 16 baldosones de la puerta de mi casa y se está cayendo gente”.

En cuanto a los temas desacostumbrados, sobresalió el presentado por un asistente que denunció a “los delincuentes y desalmados que manejan el cementerio de Chacarita”. Mencionó que “se roban las cruces de las tumbas”, que “los techos de las galerías están todos rotos” y las palomas anidan en ellos. “Usted está poniéndole flores a un difunto y resulta que por ahí le cae algo de una paloma encima”, ilustró.

Denunció asimismo que “no hay seguridad, hay violaciones dentro de las galerías de la Chacarita” y señaló: “Nunca pude hablar con el director porque no lo encuentran, pero la misma gente que trabaja ahí le dice que el director tiene su mafia para robar”.  

Otros reclamos puntuales incluyeron el mal estado de las veredas de la plaza Irlanda y los altos precios en las ferias itinerantes.

Respuestas de Rodríguez Larreta

En sus respuestas, Rodríguez Larreta se refirió en primer término al  “tema de las veredas” y reiteró lo que ha explicado pacientemente a lo largo de los últimos años: “La vereda es responsabilidad del frentista, siempre fue así, salvo que la haya roto una empresa de servicios públicos”. Puntualizó que en ese caso “lo tienen que arreglar ellos y como todo, algunos arreglan bien y otros dejan un desastre”.

E informó: “Nosotros estamos encima de ellos y tenemos formas de presionarlos, pero es importante que si ustedes ven que las empresas de servicios no arreglan bien nos avisen rápido, es más fácil para nosotros reclamar una rotura de la semana pasada que una de hace ocho meses”.

Explicó una vez más que “el otro caso es el tema de las raíces de los árboles” y contó que “en esta ciudad a alguno se le ocurrió, hace muchos años, poner árboles con raíces que salen para arriba, que es una locura, pero ya están”. Recordó que esas especies “no se plantan más desde hace bastantes años” y que “la mayoría de los árboles que están, como los jacarandaes y eucaliptos, no rompen las veredas porque tienen raíces para abajo”.

Con respecto al “tema de la iluminación”, anunció que el gobierno local está “cambiando toda la iluminación de la ciudad a leds, que consumen mucha menos energía y duran muchísimo más”. Explicó que se trata de “una inversión enorme” y que “ya están prácticamente terminadas todas las avenidas de la ciudad, debe estar en casi el 60% la ciudad ya cambiada” y que “más o menos para fin del año que viene debería estar terminada esta zona, que es la zona centro de la ciudad, donde hay más densidad de gente”.  

Acerca del cementerio de La Chacarita, notificó: “Lo cambiamos al director”. Seguidamente, puntualizó: “Tenemos un lindo proyecto para mejorar el cementerio y todo su alrededor: ya se mejoró mucho la entrada principal, que era una boca de lobo, y cambiamos todos los puestos de flores de la parte de adelante pero, como dice el señor, adentro todavía tenemos problemas”.

Con referencia a las ferias itinerantes, explicó que “los precios    se negocian todos los meses y se presiona a los comerciantes para que los pongan un 25% o 30% más bajo [de los que exhiben los comercios en general]”. Y declaró: “Tomo la inquietud y vamos a volver a poner presión para que estemos seguros de que los precios estén más bajos: esa es la idea.  Nosotros ponemos la feria pero el que vende no es el gobierno”.

A propósito de la plaza Irlanda, aclaró que “el problema no es la vereda de la plaza, el problema es la plaza”. Y prosiguió: “Venimos haciendo un gran esfuerzo por arreglar y mantener bien todas las plazas de la ciudad: hoy los espacios verdes públicos están muchísimo mejor, no sólo por el esfuerzo que hemos hecho nosotros sino porque la gente los tiende a cuidar más cuando están arreglados”.

A renglón seguido, anunció: “La plaza Irlanda es una de las que está en el plan de arreglos de este año; teníamos un problema con la conexión de Edesur, que no nos daba la electricidad para el riego, pero ya conectó la subestación”.

En lo que hace a los contenedores, los definió como “otro gran cambio en la ciudad” y manifestó: “Hace cuatro o cinco años  nos lanzamos a cambiar todo el sistema de recolección de basura en la ciudad”.

Dijo después que “es insostenible para el medio ambiente que una ciudad del tamaño de Buenos Aires no haga un esfuerzo por separar y reciclar la basura”. Informó en ese sentido que “toda la ciudad ya tiene contenedores negros, de los grandes, para basura general” y que “la experiencia muestra que donde están, después de seis meses durante los que la gente se acostumbró, está más limpio”.

Anticipó que “ahora viene el segundo paso, que es el contenedor verde” y precisó que esos recipientes ya se han instalado “en el 40% o 50% de la ciudad, con experiencias en algunos lados mejores y en otros peores, porque no todos separan, pero todos los meses la cantidad de gente que separa aumenta”.  

Con relación a los cortes de energía, recordó que “la responsabilidad de la regulación del servicio eléctrico es nacional y siempre fue así”, pero apuntó: “Nosotros trabajamos en equipo con el gobierno nacional y juntos podemos reclamar”.

Consideró que “no es solución poner en todos lados grupos electrógenos”, que “no hay más en la ciudad y además duran muy pocas horas” y sólo “se ponen en los lugares más sensibles como hogares de ancianos, asilos, centros de salud y centros comunitarios”.  

Con relación al “tema del estacionamiento”, acotó que “el código de construcción actual dice que cada tantos departamentos hay que poner tantos estacionamientos, y esto se cumple”, pero advirtió que “en una ciudad donde todos los años se venden de ochenta a cien mil autos nuevos, no hay estacionamiento que aguante”. Dijo además que “todos los días entran en la ciudad un millón de autos de la provincia”.

En su opinión, este problema “no se soluciona con más estacionamientos, esto se mejora con más transporte público”. Y anotició: “Estamos comprando 350 vagones nuevos para  mejorar la frecuencia del subte, seguimos construyendo Metrobús: acá cerquita tienen el de Juan B. Justo, que funciona bien, y acabamos de construir el de la avenida San Martín”.  

En el comentario final, abordó “el tema más sensible de la ciudad, que es el de la inseguridad”. En primer lugar, recordó: “Nosotros reclamamos durante años, cuando [Mauricio] Macri era jefe de Gobierno, que nos pasaran la policía, y una de las primeras cosas que él hizo como presidente fue firmar el 4 de enero el decreto para empezar el traspaso”.

Y continuó: “Durante años vine a reuniones como esta en toda la ciudad y cuando me preguntaban yo decía ‘no tengo nada que ver, es culpa del gobierno nacional’. Ya no lo puedo decir más, y hace diez días, después de cuatro meses de evaluar cada legajo uno por uno, se firmó la lista de dieciocho mil y pico [de efectivos] que nos pasaron, y de mil y algo más que nos pasan a fin de año”.

Anotició del comienzo de un proceso de unificación,  y comentó que “no puede ser que la ciudad tenga dos fuerzas, que hoy una tenga un sistema de Handy que no se habla con el otro porque están en frecuencias distintas”, que “es increíble que la Metropolitana no pueda mirar las cámaras que tiene la Federal y viceversa porque son sistemas diferentes” y que las dos “tienen distintos horarios de trabajo, tienen distintos sistemas de adicionales, tienen escalafón distinto…”

Advirtió que “cambiar una organización como la Federal con su historia y sus cosas buenas y malas no va a ser de un día para el otro”, y subrayó: “Yo soy el responsable de empezar ese trabajo de juntar a dos policías; tenemos una buena experiencia con la Metropolitana, y 54 comisarías de la Federal que tenemos que cambiar para llevarlas a la filosofía de trabajo de la Metropolitana. Estoy convencido de que son pasos que estamos dando en la buena dirección y van a terminar mejorando la seguridad en la ciudad”.