Separación de residuos: la FAUBA a la cabeza
- Por Tras Cartón
- Tamaño disminuir el tamaño de la fuente aumentar tamaño de la fuente
La Facultad de Agronomía de la UBA es una institución pionera en la separación de residuos. Así lo hizo saber la Dirección de Comunicación Institucional de esa casa de altos estudios, la que, en el mes internacional del medio ambiente, propone “repensar la temática de los residuos y la inclusión social, a partir de la propia experiencia institucional”.
En primer término, la información pone de manifiesto que la producción de residuos sólidos urbanos es una de las preocupaciones ambientales más importantes de la sociedad actual puesto que, si no se manejan correctamente, esos desechos representan serios riesgos para la salud de la población, la preservación del medio ambiente y la conservación del paisaje urbano.
Por otra parte, muchos de los residuos que se desechan pueden convertirse en recursos materiales para distintos actores sociales que los utilizan como bien material mediante su recuperación y comercialización.
Así las cosas, la Facultad, en el mes internacional del medio ambiente, propone poner el acento en la temática de los residuos que se reciclan y, al mismo tiempo, en la inclusión social que genera su separación.
El programa UBA-Verde
De acuerdo con la referida comunicación, la Universidad de Buenos Aires, a través de la Secretaría de Extensión Universitaria y Bienestar Estudiantil, ha implementado el programa UBA-Verde, que busca separar los residuos generados por todos los edificios pertenecientes a la institución.
Se trata, según se explicó, de un programa que procura unir el conocimiento y la problemática de un sector vulnerable, y hacer extensión universitaria, de modo de poder llegar a esos sectores transmitiendo conocimientos y buscando soluciones a las problemáticas reales que presentan.
Cabe destacar a esos efectos que dentro de los edificios de la UBA trabajan y estudian más de 360.000 personas que generan nada menos que unos 160.000 kilos de residuos por semana, de los cuales cerca de la mitad puede reciclarse, evitándose que llegue al relleno sanitario.
En ese contexto, la Facultad de Agronomía es la institución pionera en la separación de los residuos: actualmente está separando cerca de un 70% de los que genera. A esos efectos, hace más de seis años que trabaja junto a la cooperativa El Álamo, que una vez por semana recolecta alrededor de cinco contenedores de residuos reciclables.
Para Alejandra Reich, coordinadora general del programa, “la inclusión social tiene que ver con la idea de que la acción no se limite solamente a entregarle a un cartonero el material limpio y seco sino también el de generar un vínculo con este sector de la población vulnerable donde falta muchísimo conocimiento, y que la universidad, en su misión de extensión, puede colaborar y devolver a la sociedad”.
La funcionaria advirtió que “hay muchos reciclables que los cartoneros no reciben porque no los venden, porque no hay industrias o porque no pesan y ocupan mucho volumen, como por ejemplo el telgopor”, y destacó asimismo que se ha puesto en práctica una campaña anual de recolección de residuos electrónicos “para evitar que lleguen a un relleno sanitario y contaminen”.
Con relación a este último caso, refirió: “En la FAUBA los recolectamos y los entregamos a la Fundación María de las Cárceles, que los lleva a distintas penitenciarías donde las personas privadas de su libertad los recuperan y aprenden así un oficio. Posteriormente, la Fundación dona las computadoras y demás dispositivos electrónicos reciclados a escuelas del conurbano bonaerense”.
Y agregó: “De este modo, hay una interacción entre los presos que aprenden un oficio y los niños que reciben esas computadoras y, por otro lado, se recupera un elemento que podría haber terminado en un relleno sanitario y contaminando”.
Se refirió además a las ferias “Del productor al consumidor” que se realizan mensualmente en la Facultad, y en las que se instala un espacio denominado Punto Verde para que estudiantes, docentes y trabajadores de esa casa de estudios puedan depositar sus residuos y los vecinos del barrio “acerquen sus reciclables y, a futuro, lo tomen como referencia”.
Al respecto, Reich anunció: “En las ferias, además de instalar un Punto Verde, estamos trabajando en idear un plan para que sus actividades sean más sustentables, reduciendo la huella de carbono”.
Por último, destacó: “En Agronomía entendemos que si hacemos un buen manejo de los residuos que se generan en la facultad podemos minimizar la cantidad que llega a los rellenos sanitarios y bajar el volumen de basura. Si los separamos y se los damos a las cooperativas de cartoneros, estamos generando inclusión social y economía social, reinsertando en el sistema productivo, como materia prima, materiales usados. Es solo una cuestión de cambiar hábitos y de asumir la responsabilidad de que los residuos que generamos son nuestros”.





