“Vamos andando hacia el no ser urgente”
- Escrito por Victor Pais
- Tamaño disminuir el tamaño de la fuente aumentar tamaño de la fuente

“Vamos andando hacia el no ser urgente”
Punto de partida: Haydée Breslav, periodista de nuestro equipo, falleció el pasado 15 de abril a los 81 años. Todos los que la conocimos (y leíamos sus notas, sobre todo aquellas que firmaba) la admirábamos. Nosotros tuvimos el privilegio durante más de 20 años de que nos acompañara en este emprendimiento llamado Tras Cartón y ahora debemos experimentar el dolor de su irreparable pérdida.
Olfato para saber dónde está la noticia, rigurosidad en la constatación de la validez de las fuentes, exquisitez literaria en la redacción… Con todo eso nos encontramos al conocerla allá por 1999. Una periodista ya formada y experimentada, con un extraordinario bagaje cultural que le permitía incursionar en las más variadas facetas de la realidad y con la firme concepción de un periodismo con agudeza crítica y capaz de visibilizar la injusticia social y, sobre todo, a los que luchan contra ella.
Con el objeto de cubrir la información en el terreno de los hechos, supo poner el cuerpo mientras su salud se lo permitió. ¡En cuántas asambleas, actos, movilizaciones, el equipo de Tras Cartón tuvo en ella un bastión para registrar lo acaecido! ¡En cuántos acontecimientos de toda índole, y también de los que implicaban su cuota de riesgo, como lo fue, por ejemplo, el de la violenta Plaza de Mayo del 20 de diciembre de 2001, estuvimos codo a codo con ella!
¡Cuántas cosas nos dejó Haydée! ¡Cuánto nos enseñó! ¡Cuánto hizo crecer en calidad a nuestro medio! Tuvo la virtud de ponernos una vara más alta, de hacernos más profesionales. Su vasta producción será siempre una referencia para nosotros.
¡Qué decir además de lo que sabía de tango, de poesía, de música, de pintura, de cine! Afortunadamente, la afición que compartíamos por revalorizar todas esas expresiones redundó en que de su pluma salieran un sinnúmero de refinadas semblanzas evocativas de figuras artísticas, trabajos de investigación y entrevistas a personalidades destacadas de la cultura. El contador de visitas a nuestro sitio web acusa, en buena parte de sus artículos de estos géneros, miles de lecturas.
Y no solo sabía de poetas. También ella lo era. Conservamos en nuestro archivo un poemario inédito de trajinados y profundos sonetos. Y entonces, ¿por qué no concluir estas palabras con uno de ellos, precisamente en aquel “La muerte”, en el que Haydée cantó cómo imaginaba su fin?: “Me entregaré a la muerte mansamente. / Vendrá de noche y rozará mi almohada, / a besar me dará la mano helada / y después la pondrá sobre mi frente. / Amiga, le musitaré, impaciente / esperé largo tiempo tu llegada. / Pronto amanecerá: no digas nada, / vamos andando hacia el no ser urgente. / Ya no habré de agotarme en lucha vana / ni me preguntaré cada mañana / si el día va a ser bueno o desdichado. / Luego el olvido borrará señales / del triunfo y la derrota, por iguales. / Nadie me llorará. Seré pasado”.